Se fríen en la sartén con manteca unas lonchitas finas de jamón. También se rehogan con él todas las verduras cocidas, que se tendrán preparadas, tales como guisantes, cabezas de espárragos, alcachofas, habichuelas tiernas, patatas en rodajas finitas y fritas, pimientos en pedazos y una salsa de tomate, salteándolo todo junto.
Cuando se haya terminado se coloca en una fuente que resista el fuego, se estrellan sobre estos los huevos que se quiera, y si gusta se espolvorean de queso y mantequilla poniéndolo después en el horno hasta que se cuajen los huevos.