Para cada libra de melón, se ponen tres cuarterones de azúcar. Se pela y limpia de semillas la fruta; se hace pedazos, no muy grandes, y se dejan juntos melón y azúcar.
Al día siguiente, por la mañana, se coloca en una cacerola al fuego, y se deja cocer un poco, hasta que el jarabe adquiera el punto deseado. Es un dulce que se hace en un momento; pero deben elegirse buenos melones, que no estén muy maduros.
Si se desea que tenga más almíbar, se pone más azúcar; esto es, libra de ésta por libra de melón.