En tres cuartillos de agua se pone una libra de azúcar moreno, y atados en un trapito un puñado de pimienta en grano, un cuarterón de sal de nitro y un puñado de sal gorda de cocina.
Este líquido y sazón se cuece veinte minutos en una cacerola al fuego, echando después las lenguas para que estén en este adobo unas dos semanas; luego se sacan y ponen en agua fría, acercando la cacerola al fuego hasta que estén tiernas; después se escurren bien, y se sirven fiambres.