Este escabeche es para gastarlo pronto, pues sólo dura de tres a cuatro días, según sea la temperatura. Es un plato que se usa con mucha frecuencia en Extremadura, y resulta sabroso, agradable y, además, sencillo.
Limpio y hecho pedazos el conejo, se cuece con agua, sal, ajos y laurel. Cuando está cocido, sin deshacerse, se enharina y fríe, enhuevándolo o no, según se quiera, y se deja escurrir bien la grasa.
Hecho esto, se pone en una salsa fría, hecha con ajos machacados con azafrán, unas cáscaras de naranja, una hoja de laurel, vinagre, agua y unos granos de pimienta, si gusta.