Se les nombra así, porque a estos pájaros se les puede dar la forma de una chuleta, dividiéndolos en dos mitades, si se quieren pequeñas, formando el hueso de la chuleta con el muslo del ave. Si se hacen mayores, se abren por en medio, aplanándolas, y cortadas todas las extremidades, se les deja un alón para que éste parezca ser el hueso de la chuleta.
Se sazonan con sal, ajo y perejil muy picaditos, rodándolas con zumo de limón y manteca derretida. Al ponerlas en la parrilla se rebozan en pan rallado y se asan a fuego lento, envueltas en papel ó sin él.