LITERATURA LATINA - La literatura pagana entre los siglos II y VI
PROSA
La elocuencia y la retórica están representadas en el siglo II por M. CORNELIO FRONTON,
que además de algunas disertaciones, nos ha dejado una interesante correspondencia con
Marco Aurelio, Antonino Pío y otros, y en el IV por Q. AURELIO SIMACO (345-405),
ardiente defensor del paganismo en una época en que la nueva religión contaba ya con
eminentes adeptos. El africano APULEYO (125?-fines del siglo II), ingenio singularísimo,
debe su fama a la obra titulada Metamorfosis o El asno de oro, novela de magia en que se
narran las aventuras, referidas por el protagonista después de recuperar la forma humana,
de un mercader de Corinto, transformado en asno. Digno de recordación es el bello episodio
de los amores de Psiquis y Cupido, tan imitado en épocas posteriores. En el sector
historiográfico deben mencionarse los Escritores de la historia Augusta, amplia colección de
biografías, anecdóticas y de escaso valor, compiladas en los siglos III y IV, de los
emperadores, sucesores al trono, usurpadores y pretendientes, desde Adriano hasta
Numerino (117-284), con una breve laguna entre los años 244 y 254; a EUTROPIO, autor de
un resumen de la historia romana desde Rómulo hasta su tiempo, y, sobre todo, a AMIANO
MARCELINO (330-400), que continuó, para el período comprendido entre Nerva y la muerte
de Valente (378), las Historias de Tácito, en una obra considerable, imparcial y objetiva.
Finalmente, desde el punto de vista de la erudición merecen recordarse las Noches áticas de
Aulo Gelio (siglo II), preciosa compilación en veinte libros de multitud de noticias sobre
historia, derecho, arqueología, gramática, etc., y, posteriormente, las Saturnales de Macrobio,
que abundan en datos acerca de religión, costumbres y antigüedades romanas.