LITERATURA LATINA - Epoca de Augusto (42-14 A. DE J. C.)
Con el triunfo de Octavio sobre Antonio en el combate naval de Actium (31 a. de J. C.), se
inaugura en la historia de Roma la edad imperial, porque, si bien subsistían aún las formas
republicanas, todos los poderes se concentraron en manos de un solo hombre. Tras un
período de violenta agitación política, iniciábase una era de paz y de relativo bienestar, que
se mantuvo durante el reinado de Augusto. En las épocas precedentes todos los géneros
literarios habían sido ya cultivados, por lo cual los romanos poseían ya una tradición
literaria importante. El propio emperador, secundado por sus más eminentes colaboradores -
Mecenas y Asinio Polión- procuró utilizar las letras para sus propios fines de reanudar la
tradición nacional tan quebrantada por las guerras civiles, revivir en las gentes el deseo del
pasado y, con el sentimiento de la naturaleza y el gusto por la agricultura, la antigua
sencillez de las costumbres: así se explica la aparición de las Geórgicas, de la Eneida y de la
Historia de Tito Livio, obras en verdad imperecederas, que marcan el momento cumbre en la
historia literaria del pueblo romano. En términos generales, puede decirse que durante la
época de que vamos a tratar prevaleció la poesía (pastoril, heroica, didáctica, lírica, satírica y
elegíaca, con marcada decadencia de los géneros teatrales) sobre la prosa, y que la oratoria,
necesitada para vivir de un ambiente de libertad que ahora se le negaba, refugióse en el
recinto de las escuelas, donde no tardó en convertirse en un ejercicio retórico declamatorio y
sin contenido. En orden a otros estudios, como los gramaticales, jurídicos, etc., produjéronse
obras notables, que no nos es dado examinar aquí.