LITERATURA ESPAÑOLA - Siglo XVI: plenitud renacentista
LA NUEVA POESIA: ADOPCION DE LOS METROS ITALIANOS
DISCIPULOS Y CONTINUADORES DE GRACILASO. Aceptado el triunfo del italianismo,
la poesía española entra realmente en su Siglo de Oro. Los poetas de la escuela tradicional -
en la que van unidas ya las formas trovadorescas con el legado popular-, que pocos años
antes ha dado en Gil Vicente frutos de exquisita belleza, se oponen a la innovación,
acaudillados por Cristóbal de Castillejo (1549-1613). Desaparecen en esta época algunas de
las formas típicas de la Edad Media como el verso (le arte mayor; pero la poesía de canciones
y coplas en octosílabos, a la antigua usanza castellana, todavía se cultiva por excelentes
poetas. El mismo Castillejo, Gregorio Silvestre, Antonio Villegas, Sebastián (le Horozco,
Jorge de Monte-mayor y Diego Hurtado de Mendoza producen en la vena tradicional poesía
no desdeñable. Sin embargo, la poesía italianizante es superior en calidad, hasta que en el
XVII, Lope de Vega, Góngora, Quevedo y otros innumerables poetas logran igual excelencia
en las dos escuelas y hasta cierto punto las funden.
Entre los italianizantes contemporáneos de Garcilaso o de las generaciones inmediatas
sobresalen Hernando de Acuña, Gutierre de Cetina, Francisco de Figueroa, Francisco de
Aldana y algunos de los ya citados entre los poetas tradicionalistas, que terminan también
por adoptar el italianismo.