LITERATURA ESPAÑOLA - A qué llamamos literatura española
DEFINICION DEL TERMINO
La literatura que vamos a estudiar no nace hasta el siglo XII cuando, ya muy avanzada la
Edad Media, se inician en los pueblos de Europa unos movimientos de cohesión política y
espiritual, de los que emergerán en el Renacimiento las nacionalidades modernas con sus
caracteres distintivos. Van asociados esos movimientos al desarrollo de las diferentes
lenguas nacionales que, en el mundo románico, se derivan directamente del latín.
Por eso al hablar de literatura española es preciso aclarar lo que este conjunto incluye.
Queda fuera de la denominación de literatura española, tal y como se emplea hoy, una parte
considerable de lo que los autores nacidos en la península ibérica, la antigua Hispania,
produjeron antes de que adquiriese su pleno desarrollo la lengua española o castellana.
Hay una literatura hispano-latina con escritores como Séneca, Marcial, Lucano u otros
muchos que nacieron en España y en cuya obra se perciben cualidades persistentes del
espíritu español. Hay también una literatura hispano-árabe y otra hispano-judía, que llegan
a su plenitud en los siglos XI y XII. Manifestaciones menores o intermedias de estas
literaturas, que podemos llamar prenacionales, serían las obras de los escritores latino-
cristianos de la época visigoda entre los siglos IV y VII, como San Isidoro, el poeta Prudencio
o el historiador Paulo Orosio o de los mozárabes como Alvaro Cordobés y Juan Hispalense
en los siglos IX y X.
Finalmente, dentro de un amplio concepto de lo hispánico, en una literatura española
debería incluirse también el estudio de los escritores españoles que en los siglos XVI y XVII
escribieron en latín y de escritores portugueses, algunos de los más grandes, como Luis de
Camoens, que cultivaron el castellano.
El nombre y concepto de literatura española ha llegado a nosotros, por lo tanto, asimilado al
de literatura de lengua castellana. La causa principal ha sido la de que el antiguo dialecto
castellano, hermano de las otras lenguas neolatinas de la península, adquirió un desarrollo
literario más amplio, además de haberse convertido en el idioma oficial de la nación
española. Pero aun restringido ya el concepto que tratamos de definir al de las obras escritas
en lo que hoy llamamos lengua española o castellana, vemos que una parte considerable de
éstas quedan fuera del estudio de la literatura española. Nos referimos a las escritas en el
Nuevo Mundo, especialmente desde la independencia de las naciones hispanoamericanas
Podría, pues, ampliarse el concepto de literatura española hasta incluir el estudio de todos
los autores nacidos en el territorio de la antigua Hispania y en el de las tierras del Nuevo
Mundo a las que España extendió su lengua. Es el criterio que siguió Menéndez Pelayo.
Puede, por el contrario restringirse, y así lo hacemos nosotros, a las obras escritas en
castellano por autores nacidos en España o por algunos extranjeros que cultivaron la lengua
española.