INGENIERIA ELECTRICA - Electromagnetismo
CAMPANILLAS ELECTRICAS
SONADOR TELEGRAFICO. Una de las
primeras aplicaciones prácticas de los
electroimanes tuvo lugar en los sonadores telegráficos.
La construcción de estos aparatos es enteramente similar a la de la campanilla descrita
anteriormente, con las dos bobinas con núcleo de hierro dulce y la armadura, que se mueve
alejándose por efecto de un resorte y acercándose por la atracción del electroimán cuando
circula la corriente por las bobinas. En la figura, se muestra un circuito telegráfico sencillo; el
manipulador telegráfico realiza las mismas funciones que el botón en el circuito de una
campanilla eléctrica. Cuando se aprieta el manipulador se cierra el circuito y circula una
corriente por el circuito telegráfico y las bobinas del electroimán, creándose, instantáneamente,
un intenso campo magnético que atrae la armadura hacia los polos del electroimán, y hace
golpear la barra que lleva la armadura contra una pieza metálica relativamente sonora,
oyéndose entonces un golpe; cuando se retira la mano del manipulador o se deja de hacer
presión, se levanta el manipulador, con lo que se interrumpe la corriente eléctrica en el circuito
y desaparece inmediatamente el campo electromagnético de las bobinas, librándose la
armadura, que vuelve a su posición de reposo por efecto del resorte, y queda así en posición
para repetir la operación.
El golpe producido por la barra de la armadura al volver a su posición de re poso tiene un
sonido diferente al que produce cuando es atraída por el electroimán, y el telegrafista
experimentado reconoce fácilmente, y distingue así, los intervalos cortos o "puntos" de los
intervalos más largos o "rayas" cuyas diferentes combinaciones forman el código telegráfico
para letras, números y otros signos.
Esquema que representa un circuito telegráfico de una línea. El primer empleo industrial de
los electroimanes fue precisamente en los sonadores telegráficos.