GEOGRAFIA ECONOMICA - Aprovechamientos forestales
RECOLECCION DE FRUTOS
La recolección de frutos y materias extractivas es tanto o más antigua que la caza y que la pesca
y, en muchos aspectos, más rudimentaria. A veces no requiere otro trabajo que levantar el fruto
maduro caído al suelo. Pero los recolectores de los bosques tropicales practican diversas labores:
buscan las raíces que son base de productos como la zarzaparrilla; cortezas de quinina y otras
que sirven para taninos o curtiembres; hojas que se utilizan para bebidas, drogas, fibras, bardas
y tejidos; nueces, que constituyen un rico alimento y de las que se extraen aceites o con las que
se fabrican botones y hebillas; las fibras que cubren algunas semillas, como el kapoc, tienen
distintas aplicaciones; hay troncos de árboles que producen caucho, otros chicle, goma balatá y
cera, como también producen cera muchos bichos parásitos; los cocos y los dátiles son también
productos espontáneos, aunque su cultivo se haya industrializado. La seda natural es también el
producto de un parásito cuya cría ha sido industrializada. La tagua o marfil vegetal es la semilla
de una palmera enana que abunda en la zona ecuatorial de América del Sur y que los roedores
ahorran el trabajo de mondar, pudiendo recogerse lista para la exportación. Las castañas de Pará
o de Cajú son fruto de unos árboles que crecen en las tierras bien drenadas del Brasil y que
adquieren proporciones gigantescas; es un alimento sano, de fácil recolección, que los indígenas
aprovechan ávidamente y que adorna las mesas lujosas de Europa.