BOTÁNICA Crecimiento y movimiento de las plantas
GEOTROPISMO
Se llama geotropismo al fenómeno por el cual las plantas orientan el crecimiento de sus
órganos ejes en el sentido de la dirección de la gravedad, permaneciendo en esa posición.
Puede ser positivo o negativo. En las raíces es positivo porque crecen en dirección de la
gravedad y negativo en los tallos porque crecen en el sentido opuesto al de la gravedad. Las
raíces secundarias y las ramas de las plantas son en general insensibles al geotropismo, por lo
que se denominan plagiotrópicas. Aun así, si se corta el eje principal, sea del tallo o de la raíz,
una o dos yemas laterales, que debían producir ramas plagiotrópicas, brotan bajo la acción del
geotropismo sustituyendo el eje destruído.
Se denominan diageotrópicos los tallos que orientan su crecimiento en dirección
perpendicular a la gravedad, como son las plantas postradas o rastreras.
En los neumatóforos o raíces respiratorias, el geotropismo es negativo, pues tales raíces crecen
en sentido contrario a la gravedad, a fin de procurarse el oxígeno libre que necesitan.
El geotropismo es más acentuado en las plantas cuya estructura anatómica les da suficiente
rigidez para que puedan mantener sus tallos en posición perfectamente vertical. En las plantas
que no poseen tal estructura, los tallos no se mantienen erectos, volcándose al suelo o
necesitando soportes o tutores para mantenerlos. En las plantas trepadoras aparecen órganos
accesorios destinados a mantener los tallos en geotropismo negativo, que son las raíces aéreas,
los zarcillos, etc.; las plantas de tallo voluble lo hacen enrollándose es el primer soporte que
encuentran.
El geotropismo, tanto de la raíz como del tallo, es útil a la planta por cuanto la posibilita para
obtener la luz necesaria para la fotosíntesis (tallo), el agua y elementos nutritivos del suelo
(raíz) con mayor facilidad.