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HISTORIA DE LA CIENCIA - El siglo XX
EL MUNDO FISICO: EL MACROCOSMOS.
SONDEO DEL UNIVERSO CON
INSTRUMENTOS MAS PODEROSOS
DE SITTER Y LEMAITRE: EL UNIVERSO SE DILATA
En la imagen de la teoría relativista, la gravitación es una tendencia del espacio a recogerse
sobre sí mismo: la materia cierra en torno suyo al Universo, y el Cosmos es, pues, finito,
aunque permanece ilimitado. Si un viajero pudiese recorrer con la velocidad de la luz, siempre
en un mismo sentido el Cosmos, se desplazaría a lo largo de un círculo máximo del Universo
curvado, y de este modo llegaría después de varios miles de millones de años al punto de
partida sin haber tropezado en parte alguna con límites. Finito y esférico en el espacio, el
Cosmos de Einstein es, sin embargo, infinito en el tiempo; éste corre rectilíneamente. Curvo en
el espacio y recto en el tiempo, el universo de Einstein tiene la forma de un cilindro,
naturalmente con cuatro dimensiones. Sin embargo, el holandés WILHELM DE SITTER (1872-
1934) demostró, en 1917, que las ecuaciones relativistas permiten también otra solución y
propuso un modelo de universo hiperboloide en el espacio-tiempo. Ahora bien, ambos
investigadores llegaron a sus modelos por medio de simplificaciones: Einstein descuidó los
movimientos, de Sitter las masas de los cuerpos celestes. Ninguno de estos modelos
corresponde al estado actual, real, del Cosmos. Un modelo real, dijo en 1927 el sabio belga
GEORGES LEMAITRE, debe dar cuenta tanto de los movimientos como de las masas de los
astros. Razonamientos matemáticos, agregó Lemaitre, muestran, sin embargo, que tal universo
no sería estable, debería dilatarse lentamente.
Fue
a esta altura del problema cuando
intervinieron las observaciones de Slipher y Hubble, con el sorprendente descubrimiento de
que las galaxias parecen alejarse de la Tierra a enormes velocidades. ¿Solamente de la Tierra?
No solamente de ella y de nuestra Vía Láctea, sino que también se alejan unas de las otras: una
fuga general que arrastra al conjunto del Universo con sus miles de millones de galaxias en el
torbellino de la dispersión total de su materia. Un astrónomo, en' otra Galaxia, vería a nuestra
Vía Láctea escapar de la suya. Esta fuga de las galaxias es lo que se traduce por la dilatación
del Cosmos. Semejante a una gigantesca burbuja de jabón, el Cosmos está afectado por una
expansión progresiva, su espacio se dilata incontenible. El radio del Cosmos, afirmó
Eddington en 1931, se duplica cada 1.300 millones de años. La expansión, aseguró el físico
norteamericano Richard Tolman, en 1936, continuará hasta alcanzar cierto equilibrio, punto en
que comenzará la contracción, seguida de nuevo por la fase de dilatación. El Universo sería
similar a un inconmensurable acordeón, ora contrayéndose, ora expandiéndose...