HISTORIA DE AMERICA - La revolución de la América española
LA REVOLUCION EN EL BRASIL Y LAS RELACIONES ENTRE EL BRASIL Y EL PLATA
En 1807 el príncipe Juan ocupaba en calidad de regente el trono de Portugal. Aliado con
Inglaterra, no acató el bloqueo continental promulgado por Napoleón. Este ordenó la invasión
de Portugal. La familia reinante y las principales familias de la nobleza y sus servidores —en
número de unas 12.000 personas— tuvieron que embarcarse en naves británicas y trasladarse
al Brasil, adonde llegaron en enero de 1808. El conde de Arcos, que había sido virrey del Brasil,
ocupó el cargo de ministro del interior. El advenimiento del gobierno y de la corte trajo una
prosperidad grande para la antigua colonia. El Brasil fue elevado a la categoría de reino.
Luego Juan VI asumió la corona.
Desde el año anterior, 1815, había dispuesto la invasión de la Banda Oriental (que pertenecía
al virreinato del Río de la Plata), aprovechando las disensiones producidas entre Buenos Aires
y Artigas. Cuando en 1820 Artigas, luchando contra sus antiguos lugartenientes, Ramírez y
López, fue vencido por éstos y obligado a penetrar en el Paraguay (en donde el doctor Francia
lo mantuvo encerrado hasta su muerte), los portugueses se aprovecharon de ello
para
intensificar su ocupación territorial a pesar de que en 1818 habían declarado que la hacían
para defenderse de Artigas. La debilidad del directorio les ayudó a ello. En 1821 declararon la
anexión de la Banda Oriental al Brasil con el nombre de "provincia cisplatina", gracias a la
presión del ejército del general Lecor. Pero esta anexión no fue aceptada por las autoridades
argentinas. Sin embargo, los portugueses desde 1820 consideraban a la Banda Oriental como
suya.
Desde 1814 se había establecido en Pernambuco una sociedad secreta, liberal y republicana. En
marzo de 1817 hubo un motín militar. El gobernador de esa región, Miranda Montenegro,
tuvo que capitular. La junta que se formó estuvo inspirada por un comerciante, Martins. La
revolución se extendió a Río Grande y Parahiba; Bahía aprestó un ejército para sofocarla.
Martins fue apresado con otros conjurados y todos muertos, ya en Pernambuco, ya en Bahía.
