HISTORIA DE AMERICA - La revolución de la América española
CREACION DE BOLIVIA Y FIN DE LA DOMINACION ESPAÑOLA EN SUDAMERICA
San Martín fue reemplazado por un triunvirato que duró poco tiempo. Como Alvarado fuese
derrotado en Torata y Moquegua, el gobierno se concentró en una sola mano: la del presidente
José de la Riva Agüero. Este pidió ayuda a Bolívar, quien envió 3.000 hombres, en tanto que
los realistas retomaban Lima. Las disidencias entre Riva Agüero y Torre Tagle causaron la
caída del primero. Sucre, lugarteniente de Bolívar, quedó a cargo de la defensa. El 20 de
febrero de 1824 Bolívar recibió del Congreso peruano plenos poderes. Los españoles retoñaban,
pero la batalla campal de Junín (6 de agosto), ganada por Bolívar contra Canterac, puso fin a
esos éxitos parciales. Finalmente, otra gran victoria, la de Ayacucho (9 de diciembre), lograda
por Sucre frente a La Serna, completaba la derrota hispánica.
En 1821 el coronel Güemes, que había defendido la frontera de Salta y Jujuy contra las
invasiones del ejército realista del Alto Perú, cayó herido de muerte en un afortunado ataque
por sorpresa tramado por el coronel Valdés, subordinado del general Olañeta. Pero las
disensiones en el campo realista impidieron su aprovechamiento. Ola-fleta estaba visiblemente
en contra de La Serna. El general Santa Cruz, lugarteniente de Sucre, desembarcando en Mica,
logró realizar una expedición sobre Oruro y La Paz, pero combatido por La Serna y Olañeta,
se salvó gracias a la llegada de Sucre, debiendo, sin embargo, dar por terminada su campaña
en 1823. Igual suerte corrió otra expedición patriota del coronel Velasco sobre Cochabamba.
Sin embargo, mientras el virrey La Serna actuaba desde su capital provisoria fijada en el
Cuzco, el Alto Perú seguía agitándose con pequeñas insurrecciones. Junín y Ayacucho les
dieron mayores bríos. El general Aguilera se pasó a los patriotas, de manera que antes que
Sucre penetrara en el Alto Perú sólo Chuquisaca y Potosí respondían a Olañeta. Y aun esta
última pasó de sus manos a las de Sucre en el transcurso de 1825, siendo muerto poco después
el jefe español.
En agosto de 1825 se reunió la Asamblea deliberante, la cual declaró que el Alto Perú —bajo el
nuevo nombre de Bolivia (en honor de Bolívar)— se constituía en una nueva nación. Se eligió
a Bolívar presidente, en tanto permaneciese en su territorio, y dio a Sucre (que ya era "Gran
Mariscal de Ayacucho", en el Perú) el título de Defensor y Gran Ciudadano. El 13 de agosto se
decidió por el unitarismo y el 17 se crearon el escudo, la escarapela, las nuevas monedas y los
colores de la banda presidencial. El 17 de septiembre se acordó conceder el mando supremo al
general Sucre, siempre que el Libertador se ausentase para Colombia. Entonces llegó Bolívar a
tomar posesión del cargo. La Asamblea se disolvió el 6 de octubre, convocando al Congreso
ordinario, que debía iniciar sus funciones el 25 de mayo de 1826. De este modo, las riendas del
poder quedaron en manos de Bolívar, quien pudo, por lo tanto, organizar el país
discrecionalmente.
