GEOGRAFIA FISICA - La Tierra en el Sistema Solar
ORBITA DESCRITA POR LA TIERRA
Por ello Kepler pudo demostrar que los planetas, incluso la Tierra, se movían en torno del Sol
describiendo trayectorias elípticas. Tales trayectorias no se diferencian mucho de una
circunferencia, pero traen como consecuencia el hecho de que los planetas no se hallen siempre
a la misma distancia del Sol. En el perihelio su alejamiento del astro central es mínimo y en el
afelio es máximo. Desde la Tierra se nota que el diámetro aparente que ofrece el disco del Sol
varía regularmente en el transcurso del año, tiempo que corresponde a una traslación completa
de nuestro planeta en torno de dicho astro; esta variación del diámetro solar ha sido
comprobada por mediciones de gran precisión.
Kepler descubrió, además, que tanto la Tierra como los otros planetas se mueven más
rápidamente cuando se encuentran en el perihelio que en el afelio de sus respectivas órbitas,
barriendo las rectas imaginarias que unen sus centros al del Sol áreas iguales en tiempos
iguales, lo que explica la variación de la velocidad sobre la trayectoria, siendo ésta, según se ha
dicho, elíptica y no circular.
La posición del Sol respecto a las trayectorias planetarias corresponde a uno de los focos de las
mismas También es elíptico el movimiento de los satélites en torno de los planetas y el de los
cometas en torno del Sol.
Newton demostró, basándose en las leyes de Kepler, que la Tierra se mantiene en equilibrio en
su órbita por la acción de dos fuerzas iguales y contrarias: por un lado la atracción ejercida por
el Sol (a la que se suma la realizada por nuestro planeta sobre el astro central) y por otro el
desarrollo de la fuerza centrífuga motivada por el rápido movimiento de traslación de la Tierra.
TRAZADO DE UNA ELIPSE. Método del jardinero para trazar una elipse. En la órbita elíptica
de la Tierra, el Sol ocupa uno de los focos.
