GEOGRAFIA FISICA - Origen del relieve terrestre
MANIFESTACIONES POSVOLCANICAS
Durante el aparente reposo de la actividad eruptiva o cuando esta actividad está declinando
definitivamente, cosa difícil de decidir, según hemos dicho anteriormente, ocurren algunos
fenómenos interesantes, tales como las emisiones tranquilas de gases y vapores, y presencia de
fuentes termales.
Un volcán se encuentra en estado de solfatara cuando se limita a emitir vapor de agua y ácido
sulfhídrico (este último forma depósitos de azufre) a temperaturas comprendidas entre 500 y
1000; precede a este estado el de fumarola: la emisión consiste en anhídrido carbónico y otros
gases (cloruros, vapor de agua, etc.), a temperaturas superiores a 1000, a veces hasta 5000
(fumarolas secas); por debajo de 500 las solfataras se transforman en mofetas, que emiten
especialmente anhídrido carbónico, acompañado por hidrocarburos; aunque el estado de
solfatara es bastante permanente, en relación a las fumarolas, que disminuyen su temperatura
con rapidez, al cabo de muchos siglos evoluciona, pasando al de mofeta.
GEISERES, FUENTES TERMALES
Los géiseres se presentan en zonas afectadas por un vulcanismo reciente o aparentemente
extinguido. Consisten en la erupción intermitente o continua de agua hirviendo o de vapor
cargados de sales diversas, que al depositarse en la boca del géiser constituyen a veces un
mineral de coloración amarillenta denominado geiserita. De ahí el nombre del parque de
Yellowstone (o de la piedra amarilla) de Estados Unidos, donde existen esta clase de
formaciones. Se encuentran géiseres además en Islandia y en Nueva Zelanda.
Para explicar la frecuente intermitencia de las erupciones de esta clase de manantiales, se
supone que el calentamiento principal se realiza lateralmente a cierta profundidad de la
chimenea o conducto del géiser; el agua llena dicho conducto hasta una zona crítica situada
más arriba de la región de calentamiento máximo; la vaporización brusca la arroja hacia el
exterior con violencia, y para que se realice la erupción siguiente es preciso esperar que el agua
llene nuevamente el conducto hasta la zona indicada.
En Italia y otros países se conocen fuentes que consisten en surtidores de vapor de agua al que
se asocian el ácido sulfhídrico y el ácido bórico, depositándose este último en forma de cristales
que se explotan activamente. Tales surtidores se llaman soffioni.
Las fuentes termales propiamente dichas consisten en agua que, procediendo de las grandes
profundidades o de zonas influidas por los volcanes, brota a la superficie a diversas
temperaturas, a veces próximas a 1000. Aportan sales minerales que llegan a precipitarse
formando depósitos de cierta extensión (calcita, fluorina, minerales metálicos diversos).