ECONOMIA POLITICA - Las necesidades de la vida humana
LA ECONOMIA POLITICA, CIENCIA DE LA RIQUEZA, ES TAMBIEN LA CIENCIA DE
LA ESCASEZ
Esto, que parecería querer conciliar dos conceptos contrarios como son riqueza y escasez,
no es económicamente hablando ni una contradicción ni una paradoja. Riqueza y escasez
tienen muchos puntos de contacto; y aun diremos más: un bien sólo será considerado
riqueza cuando a más de otras cualidades posea en forma muy acentuada la de ser escaso.
Para seguir adelante con nuestro razonamiento, debemos precisar más exactamente el
concepto riqueza.
Ya hemos visto cuáles son los bienes que forman la riqueza de una persona. Pero si
queremos comparar la riqueza de dos personas a fin de establecer cuál de las dos es más
rica, tropezamos con dificultades. H. M. SCOTT pone el siguiente ejemplo: "una persona
tiene una casa, tres hectáreas de tierra y una huerta; otra tiene una casa menor que la de la
primera, cuatro hectáreas de tierra y una granja donde cría puercos. ¿Cuántas habitaciones
son iguales a una hectárea? ¿Cuántos puercos son iguales a un determinado número de
surcos de coles?..." La comparación es imposible si no echamos mano a otro concepto: el de
valor. Si establecemos el valor de cada uno de los bienes, podemos establecer quién de las
dos personas posee más riqueza, ya que el valor puede ser medido o estimado en dinero,
viniendo en último término a quedar representado en el precio.
Es riqueza todo lo que tiene valor. Pero, ¿de qué depende el valor? ¿Cuáles son los
elementos que deben reunir los bienes para tener valor?
Sobre las fuentes del valor se han elaborado numerosas teorías, y entre ellas, surge como
una de las más importantes, tal fue la controversia a que dio lugar como eminentes fueron
los economistas que la sostuvieron -RICARDO, ADAM SMITH, CARLOS MARX, etc., la
que sostiene que la fuente del valor es el trabajo. Un bien vale la suma de trabajo
acumulado en él. Sin embargo, podemos comprobar a diario el error de esta teoría. El
plano de una máquina, realizado por un dibujante o proyectado por un ingeniero en pocas
horas, vale generalmente mucho más que el producido en productos agrícolas de una
hectárea de tierra, que habrán requerido meses de trabajo al agricultor.
Nosotros, no olvidando que la Economía política es una ciencia realista y eminentemente
práctica, que estudia los hechos como son y no como deberían ser, diremos que el valor de
los bienes depende en primer lugar, de su propiedad de satisfacer nuestras necesidades, y
en segundo lugar y correlativamente, de su escasez. Un bien apto para satisfacer una
necesidad y que no existe en número suficiente para satisfacer a todos, es decir, que es
escaso, tiene valor.
Las dos cualidades deben estar reunidas; el aire es necesario, pero abunda de tal manera
que satisface las necesidades de todos. No es escaso; por lo tanto, no tiene valor. Otra cosa
sería si el mismo sufriera un proceso especial, como el aire acondicionado o refrigerado. En
este último supuesto, la dificultad del proceso, o el sacrificio o costo en producirlo lo hace
escaso; por lo tanto tiene valor. Razonando de diversa manera, dice Scott, que un mosquito
albino es un ejemplar escasísimo, pero su valor es económicamente nulo, pues a nadie
interesa poseerlo.
Llegamos, pues, a establecer una correlación entre riqueza y escasez, que justifica nuestro
enunciado.
Resumiendo: riqueza es para nosotros lo que tiene valor. Valor posee todo bien necesario y
escaso. El valor es igual al precio. Con el precio pagamos nuestra necesidad del bien y su
escasez.