ASTRONOMIA - El Sol
ESPECTRO
Es bien sabido que, cuando un rayo de luz blanca se hace incidir sobre un prisma, se produce
el fenómeno de la dispersión de la luz, o sea una serie de siete franjas de otros tantos colores,
cuyo conjunto se designa con el nombre de espectro, al paso que cada pequeña porción de
franja se llama raya espectral.
Si la fuente luminosa es un sólido, un líquido incandescente o un gas sometido a muy
elevada presión, el espectro consta de una infinidad de rayas, tan próximas unas a otras, que
vienen a formar una faja única continua, en que los colores varían gradualmente, como en el
arco iris. Pero, si el foco luminoso es un gas o vapor incandescente a la presión ordinaria, su
espectro se compone de un cierto número de rayas aisladas, que no son las mismas para
todos los cuerpos, sino que dependen de la naturaleza de éstos, variando con la misma en
número y posición. Así, el vapor de sodio da una raya doble amarilla, el de talio una raya
verde, el de litio una raya roja y otra anaranjada. Del hidrógeno se conocen actualmente cinco
series de rayas, de las cuales sólo la primera consta de 30, y del vapor de hierro se han
identificado más de 1.000 rayas.
Otro hecho de grande importancia, complementario del que antecede, es que, cuando un
sólido o un líquido incandescente se halla rodeado de gases o vapores a menor temperatura,
se produce el llamado espectro de inversión, en el que aparecen, cortando el espectro
luminoso continuo del primero, un cierto número de rayas oscuras, que corresponden
precisamente, por su número y posición, a las mismas que constituirían el espectro luminoso
de dichos gases o vapores, en el caso de ser ellos la fuente luminosa principal.
Como la descomposición espectral de la luz no depende de la distancia a que se halla el foco
luminoso, se comprende al instante como, comparando los espectros de los distintos astros
con los obtenidos en el laboratorio por incandescencia de ciertas sustancias, se puede llegar a
determinar su presencia o ausencia en los astros y, en general, la composición química de los
mismos. Pero, como en el espectro actúan más o menos intensamente una serie de factores de
orden físico o químico, de aquí que los espectros nos puedan proporcionar datos precisos
sobre el estado en que se hallan las sustancias que integran los astros. Los principales datos
que nos proporcionan los espectros astrales se refieren a la presión, campo magnético,
temperatura y estado de movimiento o de reposo del foco luminoso que les da origen.