ASTRONOMIA - Las estrellas
TEMPERATURA DE LAS ESTRELLAS
Para calcular la temperatura de las estrellas se sigue el método de NORDMANN que consiste
en observar sucesivamente a través de pantallas monocromáticas las porciones de luz roja y
de luz azul de cada estrella, deduciendo de aquí su temperatura por aplicación de ciertas
leyes físicas. Por este procedimiento se ha llegado a señalar la temperatura de 23.000° para las
estrellas de tipo O: 15.000
0
para las de tipo B; 10.000° para las de tipo A; 8.000° para las de
tipo F; 6.000
0
para las de tipo G; 4.400° para las de tipo K; 4.000 para las de tipo M y 3.500°
para las de tipo N.
VOLUMEN DE LAS ESTRELLAS
Aun cuando la masa de todas las estrellas es próximamente igual a la del Sol, no así su
volumen; por lo cual las estrellas se clasifican por este concepto en enanas y gigantes: el Sol
se halla en un término medio, pero inclinándose más hacia el lado de las estrellas enanas.
Entre las estrellas gigantes destacan Arturo, de la constelación del Boyero, con un diámetro
20 veces mayor que el del Sol y un volumen 8.000 veces mayor que el de este astro;
Betelgeuse, de la constelación de Orión, con un diámetro 300 veces el del Sol y un volumen
27 millones de veces el de este astro; Antares, de la constelación de Escorpión, con un
diámetro 487 veces superior al del Sol y un volumen de 115 millones de veces mayor que el
de este astro, o sea, que su diámetro es de unos 677 millones de kilómetros, es decir, más del
doble del diámetro de la órbita terrestre.
Una de las grandes conquistas de la espectrografía ha sido el haber podido identificar en las
estrellas una buena parte de los elementos constitutivos de nuestros planetas, entre los que
destacan el hidrógeno, helio, calcio, hierro, silicio, azufre, nitrógeno, itrio, escandio, etc., y
hasta algunos compuestos, como el óxido de titanio y el cianógeno.
