ANATOMIA Y FISIOLOGIA - Tiroides
EL YODO Y LA TIROIDES
El yodo es un metaloide que existe en el suelo. De allí lo arrastra el agua y lo absorben las
plantas. Los animales, al alimentarse lo toman de estas fuentes y lo conservan en su organismo
El hombre ingiere yodo con el agua
que bebe y las plantas y animales que come, en una
cantidad de 100 a 200 microgramos diarios. El microgramo es igual a una millonésima de
gramo.
Después de absorbido, el yodo circula por la sangre en estado de yoduro y de allí lo toma la
tiroides con una avidez extraordinaria, superior a la de cualquier otro órgano, y lo concentra,
dentro de ella, aproximadamente 10.000 veces más que en la sangre. La tiroides contiene así
del yodo total del organismo.
Las células foliculares fabrican la hormona tiroidea uniendo por un complicado proceso el
yodo ingerido a una proteína. Parte de esta hormona se deposita en el coloide intrafolicular
bajo la forma de un compuesto de molécula gigante, llamado tiroglobulina, aislado por
Ostwald en 1899. El resto pasa a la sangre y se reparte por todo el organismo, también bajo la
forma de un compuesto yodado, que todavía no ha sido bien identificado.
Hay sustancias capaces de modificar el proceso de formación de la hormona tiroidea y su
conocimiento interesa al médico. El tiouracilo y otras sustancias emparentadas con éste lo
traban, disminuyendo la formación de la hormona, lo que es útil para tratar a los que la
fabrican con exceso (hipertiroideos). El exceso de yodo en la dieta también lo modera y es
aprovechado con igual objeto; la falta de yodo trae alteraciones graves que trataremos en
seguida.
Finalmente el yodo ya utilizado encuentra su vía de salida por el intestino, el sudor y, sobre
todo, por la orina.