ANATOMIA Y FISIOLOGIA - Sistema nervioso
LA MEDULA ESPINAL
LOS NERVIOS RAQUIDEOS.
De la medula espinal parten simétricamente 31 pares de
nervios: son los nervios raquídeos.
Cada nervio tiene dos raíces: una anterior o ventral, que lleva fibras eferentes, y una posterior
o dorsal que lleva fibras aferentes. Estas fibras aferentes después de abandonar el nervio y
antes de entrar en la medula hacen estación en un ganglio, donde están situados los cuerpos
celulares de dichas fibras.
Cada uno de los nervios raquídeos se distribuye por un sector del cuerpo. Así por ejemplo los
músculos del brazo están inervados por fibras motrices provenientes del 59 par cervical.
Igualmente se ha podido limitar las zonas periféricas de sensibilidad correspondientes a cada
par raquídeo.
SECCION DE LA MEDULA ESPINAL. La sección completa de la medula espinal es seguida
por la pérdida total y permanente de todo movimiento voluntario de los músculos cuya
inervación motora procede de segmentos de la medula situados por debajo del nivel de
sección, así como de la sensibilidad. Si la sección se ha realizado entre el bulbo y la medula, se
tiene lo que se llama un animal decapitado o espinal. En este caso se interrumpen las vías
eferentes que gobiernan los músculos respiratorios y el animal muere si no se le hace
respiración artificial. Una sección por debajo del primer segmento dorsal provocará la parálisis
de los músculos del abdomen y del miembro inferior, sin afectar a los músculos respiratorios
ni a los del miembro superior.
Cuando se produce la sección completa de la medula por una bala u otro tipo de lesión aguda
en el hombre, siente éste la sensación de que ha desaparecido parte de su cuerpo. Se produce
luego un estado de shock (shock espinal) en el cual no sólo desaparecen las sensaciones y la
motilidad voluntaria en las regiones correspondientes al extremo seccionado de la medula,
sino que también desaparecen los reflejos medulares de esa zona. Estos reflejos no tardan sin
embargo en reaparecer y con ellos reaparece, en cierto grado, el tono muscular y la acción
refleja de los esfínteres vesical y anal, lo que permite la evacuación refleja de la vejiga y del
recto.