ANATOMIA Y FISIOLOGIA - La vista
LAS VIAS Y LOS CENTROS NERVIOSOS VISUALES
Al nervio óptico llegan todas las fibras nerviosas especializadas que vienen de la retina. Estas
fibras traen todas las impresiones recogidas por los conos y bastoncillos, salen del ojo por la
papila y se dirigen al encuentro del nervio óptico del lado opuesto, con el que se fusionan en
el quiasma óptico, situado en la base del cerebro. De aquí parten las cintillas ópticas, una por
cada lado, que después de hacer escala en el cuerpo geniculado externo, penetran en el
cerebro y se abren en abanico y reparten en la corteza del lóbulo posterior del cerebro (ambas
márgenes de la cisura calcarina del lóbulo occipital).
Esquema que representa el camino de las vías ópticas desde el ojo hasta la corteza cerebral
occipital, y su punto de entrecruzamiento al nivel del quiasma.
La corteza cerebral occipital es la etapa final de los estímulos retinianos y constituye su centro
visual. La corteza del lado izquierdo del cerebro recibe las impresiones que parten de la mitad
izquierda de los dos ojos, y la corteza del lado derecho las impresiones que parten de la mitad
derecha. La razón está en que al nivel del quiasma se entrecruzan las fibras más internas de los
nervios ópticos y pasan al lado opuesto. Teniendo presente que un cuerpo situado a la derecha
del observador se proyecta en la mitad izquierda de las dos retinas, cuyas fibras se encuentran
luego en el quiasma y siguen juntas, se explica, 1) por qué el notable entrecruzamiento de las
vías ópticas, y 2) por qué el cerebro izquierdo es el que ve los objetos situados a la derecha y
viceversa.
El curso tan particular de las vías ópticas explica también por qué un corte del nervio óptico da
ceguera sólo en ese ojo; por qué si el corte es antero posterior y divide el quiasma, la ceguera
ataca la mitad nasal de las retinas; y por qué el corte de la cintilla óptica deja ciega la mitad de
ese lado de ambos ojos.