ANATOMIA Y FISIOLOGIA - Fecundación
Por fecundación se designa la formación del huevo, comienzo del nuevo ser, por la fusión del
espermatozoide o gameto masculino con el óvulo o gameto femenino. La necesidad del
encuentro de ambos gametos fue demostrada primeramente por Spallanzani, en 1787, y
comprobada luego numerosas veces.
DESCRIPCION
El momento óptimo para la fecundación de la mujer se halla a mediados del ciclo, es decir más
o menos 14 días antes de la menstruación, pues es cuando se rompe el folículo maduro y se
libera el óvulo que en seguida cae, entra en la trompa por su pabellón y circula lentamente en
dirección al útero. En la trompa se produce la fecundación por encuentro con el
espermatozoide, que viene ascendiendo desde el fondo de la vagina, donde fuera depositado
durante
el acto sexual, a través del útero. La ascensión del espermatozoide se debe a
movimientos propios debidos a su cola, a los que se agrega en la trompa la ayuda que le
prestan los movimientos de las pestañas de las células superficiales de la misma. La cabeza de
uno solo de los millones de espermatozoides presentes penetra en el óvulo y se fusionan los
núcleos, en tanto que su cola se pierde. El óvulo así fecundado baja al útero y anida en uno de
los repliegues de la mucosa uterina donde se segmenta y continúa su desarrollo ulterior.
Esquema de la fecundación del óvulo por el espermatozoide. A) Penetración de un
espermatozoide; B,C) división del óvulo. Abajo, espermatozoide visto con gran aumento.
DETERMINACION DEL SEXO
El sexo del futuro ser queda decidido en el mismo momento del encuentro de los gametos por
la calidad del espermatozoide y no por la del óvulo. En efecto, hay espermatozoides de dos
tipos según los cromosomas de su núcleo; uno de ellos dará lugar a varones y el otro a
mujeres. Por lo tanto, el hecho de que nazca un varón o una mujer es fruto en cierto modo
aparentemente de la casualidad, aunque la naturaleza, por razones que todavía no se conocen,
mantiene parecidas proporciones de nacimientos de varones y mujeres.
DIFERENCIACION SEXUAL
El embrión no presenta en los primeros tiempos caracteres que permitan reconocer el sexo a
que pertenece, pues es bisexuado, es decir que en él se hallan desarrollados los esbozos de
ambas glándulas sexuales. Más adelante se establece la diferenciación y sigue su desarrollo un
sexo solamente. Este origen embrionario común explica algunas de las anormalidades sexuales
observadas en el adulto.