AGRICULTURA - Gramíneas forrajeras
PASTO GORDURA
Se conoce también por molarse grass, yaragua gordura, etc. Esta planta forrajera muy
peculiar, de tallos y hojas pubescentes, es viscosa al tacto, dando la sensación de ser resinosa,
cualidad que dificulta el desarrollo, en ellas, de la garrapata.
Su clima preferido es el de temperatura media y alturas de 1.000 a 1.800 metros sobre el nivel
del mar. También en climas calientes puede lograrse su cultivo.
Se desarrolla comparativamente mejor en suelos secos de baja fertilidad, ligeramente ácidos o
neutros. Resiste el pisoteo de las bestias y las largas sequías.
Empléase para pastoreo y henificación.
La siembra se hace a mano, al voleo, mezclando las semillas con arena para su mejor
distribución, pues es muy pequeña. Se utilizan alrededor de 15 kilogramos de semilla por
hectárea.
El pastoreo debe hacerse cuando el "gordura" está tierno.
YARAGUA
Llamado también puntero, faragua, zacate yaraguá. Es bueno para pastoreo, aunque también
suele cortarse.
Es apreciado por su tamaño y por desarrollarse en tierras poco fértiles y soporta la sequía.
Resiste bien el pisoteo del ganado.
Prefiere temperaturas entre 20 y 25°C y alturas entre 1.000 y 1.800 metros. En general, crece
económicamente en terrenos secos y bajos, en clima caliente.
PASTO ELEFANTE
Se le llama también "pasto Napier". Es muy apreciado por su gran desarrollo, y se destina al
pastoreo cuando está en estado tierno, pues de otro modo es demasiado fibroso y no agrada
al ganado. Puede cortarse al nivel del suelo y darse a los animales directamente. Cuando es
tierno, tiene hasta un 3,5 por ciento de proteína y seco llega al 11.
Se multiplica, como la caña, por medio de trozos de tallo con 2 ó 3 nudos o también por
división de las cepas viejas. Se siembra a distancias de casi un metro entre planta y planta, en
surcos separados a 1,80 metros.
No es muy exigente en terreno, pero prefiere los que sostienen la humedad y son fértiles. Es
de climas cálidos, mas puede desarrollarse hasta en alturas de 2.700 metros sobre el nivel del
mar. Se calcula que en condiciones positivamente favorables, permite cortes cada 60 ó 70 días.
Admite de 2 a 3 cabezas de ganado por hectárea.
