AGRICULTURA - Forrajeras
SORGO
SORGOS DULCES.
Los sorgos dulces son mejores para ensilar, sobre todo para alimentar
vacas lecheras. Si se siembra con ese fin, puede ser sembrado al voleo. Para cortarlo debe
esperarse a que madure, pues de otro modo es amargo y no se conserva bien.
El ensilaje de los sorgos dulces tiene mucha importancia para los criadores. Hablando en
general sobre la ventaja del ensilaje, F. B. Morrison, la más destacada autoridad en materia de
alimentación animal, dice: "el alimento ensilado permite mantener más ganado en un
determinado espacio de tierra. El ensilaje suministra alta calidad y sabroso alimento en
cualquier estación del año. Es más pequeña la pérdida de nutrientes cuando la cosecha es
ensilada que cuando se utiliza en otra forma. El material ensilado se utiliza sin desperdicios.
El ensilaje puede hacerse en cualquier tiempo. El ensilaje mata las malas hierbas. Cuando una
cosecha es quitada de la tierra para ser ensilada, puede hacerse más temprano, de modo que
la tierra queda pronto disponible para otra siembra".
SIEMBRA. Conviene que el agricultor se asegure de la alta calidad de la semilla haciendo sus
propias pruebas de germinación, pues los sorgos son bastante pobres en este sentido, no
pasando muchos del 50%, es decir, que de cada 100 semillas germinan 50. También se debe
cuidar de sembrar una sola variedad, pues se cruzan espontáneamente.
Entre los tipos de sorgos forrajeros se toman en consideración por su importancia económica
en los países ganaderos, el Sudán grass, los sorgos azucarados y con particular reserva el
sorgo de Alepo.
En general, la siembra puede hacerse a voleo o con máquinas comunes, a razón de 10 a 30
kilogramos por hectárea, según las distintas especies.