AERONAUTICA - Vuelos de ruta: navegación
LA RADIO Y EL RADAR
La investigación constante del vuelo en diversas condiciones de tiempo ha desarrollado
considerablemente el uso de la radio y el radar para el aterrizaje por medio de esos
instrumentos como auxiliares de la navegación. En 1939 solamente 78 aeronaves trataron de
cruzar el océano Atlántico; 11 de ellas llegaron a su punto de destino, 28 aterrizaron en lugares
seguros y 39 se perdieron en el mar.
En 1947 las líneas aéreas efectuaron más de 150 vuelos semanales a través del Atlántico. Aún
así, el logro de un rápido desarrollo del transporte aéreo en masa dependerá del mejoramiento
de las facilidades de la navegación aérea que le permita llegar al nivel de regularidad de otros
medios de transporte tales como el ferrocarril y el ómnibus.
En los Estados Unidos solamente, con los 60.000 km. de rutas aéreas equipadas con 450
estaciones de radio, 2.138 faros, 275 campos de aterrizaje intermedios, y 133.000 millas de
tierra arrendadas para establecer líneas de 'comunicación, se siente la tarea abrumadora que
significa el tráfico aéreo que aumenta enormemente, y sin tener las suficientes facilidades para
permitir la utilización amplia de los sistemas de aterrizaje instrumental. Por eso el desarrollo
de estos equipos habrá de efectuarse muy aceleradamente durante la próxima década. Los
equipos de aterrizaje instrumental usados ahora son generalmente de dos tipos. Uno, llamado
ILS (instrument landing system, sistema de aterrizaje instrumental), utiliza las lecturas
efectuadas por el piloto, de los datos de un instrumento situado en la cabina, que es accionado
por la recepción de señales de radio provenientes de equipos colocados en el canal de
acercamiento a la pista. El instrumento indicará si se halla a mayor o menor altura de la
trayectoria de planeo adecuada, o a la izquierda o derecha de la pista.
SISTEMA DE ATERRIZAJE INSTRUMENTAL I L S
El piloto guia el avión de acuerdo con las indicaciones recibidas en el I L S situao en la cabina
y accionado al recibir las señales de radio provenientes de la estación de control. Por este
medio se indica si el avión se halla a la izquierda o derecha, alto o bajo con respecto a la
verdadera trayectoria de planeo.
El equipo GCA (ground control approach, control de acercamiento en tierra), utiliza la ayuda
de los observadores de tierra. La posición del avión con respecto a la pista de acercamiento y
trayectoria de planeo es "vista" por estos observadores sobre un radar o pantalla de
observación, y entonces se le aconsejan al piloto las correcciones que debe efectuar para
aterrizar sin inconvenientes.
Al mismo tiempo, se ha progresado mucho para intensificar la iluminación indicadora de la
pista de acercamiento durante los períodos de poca visibilidad.
Debido a los accidentes ocurridos por colisiones con montañas al volar con instrumental,
muchas líneas aéreas han equipado a sus aviones con alarmas de tipo radar, las cuales indican
al piloto obstáculos tales como picos de montaña, que pueden hallarse en su ruta.
También se han efectuado experimentos utilizando el radar para reproducir en la cabina un
cuadro o mapa del terreno, que informe también sobre la dirección del viento, ubicación de
pistas y aeropuertos, presión birométrica o la presencia de otros aviones dentro del alcance del
instrumento.
Esta aplicación del radar "nació" a principios de 1930 cuando, durante experimentos
efectuados en Sandy Hook, Nueva York, se lanzó al mar una serial de radio. Los observadores
que escuchaban con sus auriculares descubrieron que esta señal producía cierto tono al chocar
con un barco que estaba entrando al puerto de Nueva York. Ello determinó la convicción, por
parte de los ingenieros de la investigación, de que si la reflexión de las señales de radio podía
ser oída, también podría ser "vista". La electrónica ha hecho posible el desarrollo y aplicación
de estas pantallas de radar como ayuda para la navegación, y promete un gran progreso que
acreciente la seguridad de la aviación.