FRACTURAS
FRACTURA SIMULTÁNEA DE TIBIA Y PERONÉ
Síntomas.
Dolor, imposibilidad de andar, movilidad anormal, crepitación, deformación de la pierna.
Tratamiento.
La reducción se hace practicando la contra-extensión sobre la rodilla y la extensión sobre el pié. Echado el doliente boca arriba, con la pierna apoyada en las almohadas y el muslo levantado, una persona le pasa ambas manos al rededor del muslo cercado la rodilla, mientras que otra persona, sosteniendo el pie con una de las manos y el calcañar con la otra, coloca la pierna en posición recta natural, volviendo el pie un poco hacia adentro, y ejecutando tracciones graduadas en la dirección de la pierna.
La coaptación consiste en comprimir ligeramente los fragmentos hasta que se encuentren de frente uno y otro, cosa que se conoce pasando los dedos sobre la cara interna de la tibia.
Aplícase entonces el vendaje de Scultet. Consta:
1° De un lienzo de 80 centímetros de anchura, y un tanto cuanto más largo que la pierna.
2° Una docena de vendas o tiras de lienzo de 6 centímetros de ancho, y con suficiente largura para poder dar vuelta y media al rededor del miembro; el número de las vendas debe ser tal que, cubriendo las unas a las otras en la mitad de su anchura, puedan abrazar totalmente la pierna.
3° Tres tablillas y tres saquitos llenos de paja cortada o de algodón.
4° Tres cintas para atar el aparato.
Todas estas piezas deben disponerse de la manera siguiente:
Se extiende primero el lienzo sobre una mesa; se aplican después las vendas sobre este lienzo, cuidando de que cada una de las inferiores cubra la mitad de aquella que se halla inmediatamente por encima. Pénese debajo de la pierna el lienzo así cubierto de vendas, cuidando mucho de que el centro de las vendas corresponda al eje del miembro. Después de reducida la fractura, del modo que antes hemos explicado, y descansando la pierna sobre almohadas, se practica la aplicación de las vendas sobre el miembro, mientras las dos personas aseguran el muslo y la pierna en su posición.
Para ejecutar esta aplicación el cirujano debe colocarse en el lado externo del miembro y un ayudante en el costado opuesto. El cirujano toma la punta correspondiente a su lado de la venda inferior, rodea con ella un poco oblicuamente las caras externa, anterior e interna del miembro; luego el ayudante ejecuta la misma maniobra con la extremidad de la misma venda de su lado. El cirujano coge entonces la extremidad externa de la segunda venda que coloca lo mismo que la primera, y el ayudante por su parte vuelve a hacer otro tanto, y así, sucesivamente, se procede del mismo modo con todas las vendas que componen el aparato, hasta que se llegue a la última de arriba, cuidando siempre de cubrir continuadamente la tira inferior por la superior.
Envuélvense después, en los dos lados de la toalla, dos tablillas, una para el lado externo y otra para el interno del miembro. Pónese sobre la cara anterior de la pierna una tablilla más, la tercera, interponiendo, entre el miembro y las tablillas, saquitos llenos de paja cortada o algodón en rama de largura conveniente.
Se fija el aparato con cintas; asegúrase el pie por medio de una ligadura cruzada y atada a la tablilla interna y externa, y se pone el miembro en media flexión sobre una grande almohada que se extiende desde la corva de la pierna hasta más allá del calcañar.
Debe cuidarse de que el calcañar no apoye con fuerza sobre la almohada, para no experimentar una presión dolorosa, que podría ser seguida de inflamación y de escaras gangrenosas; y para evitar esto, preciso es ponerlo en vilo por medio de compresas.
La consolidación se obtiene en 40 o 50 días.
También puede emplearse el aparato inamovible, dextrinado.