FORMAS MEDICINALES

ZUMOS, JUGOS

Con el nombre de zumos se designan los líquidos que se encuentran en los órganos de los vegetales.

La extracción de los zumos que proceden de las partes verdes, y especialmente de las hojas, es muy simple: consiste en dividir la planta, contundiéndola después en un mortero y sometiéndola a la prensa.

Se opera de dos maneras la clarificación de los zumos: en frío, por filtración directa, o en caliente, para depurar los zumos que han de entrar en ciertas composiciones galénicas, o cuando su viscosidad hace dificultosa la filtración.

Los zumos ácidos que se extraen de los frutos forman una clase numerosísima. Se extraen sometiendo los frutos a la prensa después de estrujarlos con la mano cuando son tiernos y suculentos, o después de deshechos por el rallo, cuando es compacto su tejido. A veces, antes de exprimir el jugo, se deja fermentar con sus envolturas para disolver ciertos principios inmediatos.

Siempre se clarifican por fermentación los zumos ácidos, y ésta ha de cesar tan luego como esté bastante claro el zumo para poder colarse por el filtro: si se prolongara más, alteraría su sabor y propiedades.

Prepáranse los zumos procedentes de las partes verdes en el momento en que se necesitan, pero también se pueden conservar por el método de Appert. Lo mismo sucede con los zumos ácidos, siendo sin embargo preferible convertirlos en jarabes luego después de preparados.

Los jugos se alteran fácilmente, razón por la cual deben ser preparados en el momento en que se necesitan. Los jugos ácidos pueden conservarse, por el método de Appert, en vasos herméticamente cerrados; pero es mejor trasformarlos en jarabe, tan luego como se hayan preparado.