FORMAS MEDICINALES

TISANAS

Con este nombre se designan medicamentos líquidos, poco cargados de principios medicamentosos, destinados para bebida ordinaria del enfermo, y preparados por diferentes modos, tales como la decocción, maceración, digestión, y sobre todo, infusión. Deben ser ligeras y poco desagradables a fin de que no lleguen a repugnar al enfermo. Dulcifícanse con azúcar, miel, regaliz o cualquier jarabe.

En el artículo de cada sustancia medicinal, capaz de poder tomar la forma de tisana, indicamos las proporciones suyas con el agua.
En general, estas relaciones son las siguientes:

Para las raíces, gran número de hojas y cortezas, sustancia 20 partes, agua 1000; para las flores poco activas y poco aromáticas, sustancia 10, agua 1000 partes; para las flores muy activas y olorosas, sustancia, 5, agua 1000; para los frutos de plantas umbelíferas anís, hinojo, culantro, etc., sustancia 10, y agua 1000. Hay también otras proporciones, 50, 40, 100 para 1000, pero son excepciones.

No queremos decir que estas proporciones sean invariables; por el contrario, pueden variar en muchos casos; pero estas proporciones son las que comúnmente deben seguirse.

No deben ser aplicadas a las plantas venenosas que se pueden emplear como tisanas, tales como la belladona, la digital, etc.: estas exigen una indicación especial. El modo de preparación de las tisanas varía según las sustancias; en los artículos propios a cada sustancia, va indicado si la tisana debe ser preparada por infusión, decocción, maceración, digestión o simple solución.