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FIEBRES

TRATAMIENTO DE LA FIEBRE INTERMITENTE SIMPLE


Durante el período del frío.

Cubrir bien al enfermo, darle alguna infusión aromática caliente, por ejemplo, una taza de té, de infusión de hojas de naranjo, de melisa, etc. Para apagar la sed se puede dar agua fría.

Durante el periodo del calor o de la reacción.

Disminuir poco a poco el peso de las cuberturas. Sustituir las bebidas calientes por las atemperantes acídulas y frías (naranjada, agua fría, cocimiento de cebada, etc.). Si hubiere dolor de cabeza, aplicar en la frente paños mojados en agua fría simple o con vinagre.

Durante el período del sudor.

Volver a las bebida calientes, abrigar al enfermo como en el primer período, cambiarle la ropa, enjugar el cuerpo, y preservarle de todo enfriamiento. Concluido el acceso, se pueden permitir al enfermo algunos alimentos.

Durante la apirexia.

Medicamentos antiperíódicos. Sulfato de quinina en polvo, píldoras, pociones, jarabe, fricciones o lavativas. Hojas de eucalipto en infusión o polvo. Ácido arsenioso. Solución arsenical de Boudin. Quinium. Quina. Cuasia. Café no tostado con zumo de limón. Poción febrífuga. Genciana. Corteza de Winter. Centaura menor. Pimienta negra. Electuario de Fuller. Poción de Peysson. Santonina, 25 centigramos por día. Vino de Bellini. Cambio de morada o de país en algunos casos rebeldes.

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