ENFERMEDADES DEL SISTEMA CIRCULATORIO
ANEMIA
Disminución de los glóbulos rojos de la sangre. En el estado de salud, 1000 partes de sangre contienen por término medio 127 partes de glóbulos rojos. El número de 80 es el límite en que el vicio de la sangre principia a ser mórbido. El agua aumenta en la sangre a medida que sus glóbulos disminuyen.
La anemia es caracterizada por el amenguamiento del color en la piel, y por la debilidad general. La anemia es un síntoma común a gran número de enfermedades o estados mórbidos.
Muchos niños nacen anémicos, o por debilidad en los padres, o por falta del propio desarrollo. Después del nacimiento puede sobrevenir la anemia por falta de suficiente nutrimento, del aire necesario, de la luz solar, y hasta por exceso de la temperatura climatológica.
Muchas causas debilitantes traen anemia consigo, todos los esfuerzos extraordinarios, físicos o intelectuales, dolores grandes y continuados, pasiones, disgustos incesantes en la vida, pérdidas de sangre.
Muchas son las indisposiciones que conducen a la anemia, Como la tisis, el cáncer, la artritis, la sífilis, las diferentes fiebres, y sobre todo, las fiebres intermitentes. La anemia que se desarrolla en las jóvenes en la época de la pubertad, caracteriza la enfermedad llamada clorosis.
En los países cálidos se juntan multitud de causas para la producción del estado anémico, la intoxicación pantanosa, las disenterías, las pérdidas de sangre, pero casos hay en que estas causas conocidas no son bastantes a explicarlo; precisamente son esas causas las designadas con el nombre de opilación.
Tratamiento.
El tratamiento de la anemia varía naturalmente según los casos.
Los medios terapéuticos que mayor empleo tienen son los tónicos, y en panrticular las preparaciones ferruginosas; Píldoras de Blancard. Jarabe de yoduro de hierro de Blancard. Hierro Quevenne. Vino de quina y de colombo Bellino. Pirofosfato de hierro citro-amoniacal de Robiquet. Grageas de Gelis y Conté. Gránulos antimonio-férricos del Dr. Papilland. Vino de cuasia, de Saint-Raphael, de Málaga, de Jerez.
Buena alimentación; jaleas animales y vegetales. Baños calientes aromáticos. Baños fríos de río o de mar, fricciones por el cuerpo con linimento de Rosen. Aire saludable del campo.
