ENFERMEDADES DEL OÍDO Y LA NARIZ
FRACTURA DE LOS HUESOS DE LA NARIZ
Puede ser simple o complicada; los fragmentos pueden hallarse en contacto o hundirse del lado de las fosas nasales; los tegumentos están generalmente contusos o divididos.
Tratamiento.
Varía según que los fragmentos conserven o no sus relaciones. En el primer caso basta aplicar, durante algunos días, paños mojados en agua fría; en el segundo, conviene levantar los fragmentos con la sonda o pinzas, mientras que con los dedos de la otra mano se juntan los fragmentos exteriormente.
Si la reducción es difícil de mantener, introdúzcase y déjese dentro de la nariz un tapón de hilas, o el cañón de una pluma.
Combátase la hemorragia con lociones de agua fría o levantando el brazo.
Reúnanse los labios de las heridas; no se quitarán las esquirlas sino cuando estén completamente separadas.