ENFERMEDADES DEL ESTÓMAGO Y LOS INTESTINOS
TRATAMIENTO DE LA ESTRANGULACIÓN DE LA HERNIA
Se compone de los medios siguientes:
1° Acostar al enfermo boca arriba y tratar de hacer la reducción por la compresión con las manos (taxis).
2° Echado el enfermo boca arriba, un hombre tonta sobre los hombros las piernas del enfermo y le levanta de modo que a este no le quede otro apoyo en la cama que el de la cabeza y los hombros. El cuerpo del enfermo forma así una concavidad anterior, y las paredes abdominales se encuentran relajadas por la flexión de la columna vertebral. En esta posición se practica la taxis, que reduce la hernia a una mitad por la entrada en el vientre del líquido contenido en el saco herniario. Vuélvese a echar al enfermo en la cama sobre sus espaldas, y reprodúcense las tentativas de reducción en la posición horizontal.
3° Administrar un baño general de agua templada de una hora u hora y media; hacer en el baño las tentativas para la reducción de la hernia.
4° Administrar una lavativa de agua templada con 60 gramos de aceite de ricino.
5° Dar una lavativa con decocción de hojas de tabaco.
6° Aplicar sanguijuelas en el perineo.
7° Aplicar sobre el tumor compresas mojadas en agua fría, o aplicar hielo. La refrigeración por el éter pulverizado hasta a veces para alcanzar la reducción de la hernia estrangulada o no estrangulada.
8° Cercar el tumor con una tira de cautchuc, acumulando las vueltas de la tira y ejerciendo una compresión muy fuerte, sobre todo a la altura del pedículo. Es una especie de taxis superior a la compresión hecha a mano, porque la presión está regularmente distribuida, es continua y enérgica. Puédese aumentar el efecto comprimiendo la quebradura con la mano por encima de las vueltas de la tira elástica.
9° Administrar de cuarto en cuarto de hora una laza de café. Este sencillo medicamento produce a veces la entrada espontánea del intestino.
10° Cloroformizar el enfermo; continuando los esfuerzos de la reducción. Por lo común, si con la anestesia producida por el cloroformo, la reducción no ha tenido lugar al cabo de 20 minutos en las hernias pequeñas, y de 50 en las grandes, considérase como imposible; preciso es entonces renunciar a la compresión, porque las tentativas largo tiempo continuadas podrían ocasionar graves accidentes, que disminuirían las probabilidades del buen éxito de la grande operación. Esta consiste en abrir con bisturí la piel del escroto y el saco herniario, en dilatar el anillo, siendo preciso, mediante la incisión, y en empujará la cavidad abdominal el intestino o epiplón de ella salidos.
